Sembrar la luna es ofrendar la sangre menstrual a la tierra con la intensión de ofrendar a la madre terrena lo sagrado que llevamos.
Rezar la luna es una conversación entre el útero propio y el útero de la madre tierra, es permitir que nuestra información genética se trence con el Adn de ella en una espiral perfecta.
Cuando eso ocurre, despiertan las memorias más antiguas y genuinas que tu alma pueda reservar.
Cuando en 2013 comencé a sembrar mi luna, y en ello poner un rezo de sanación por mí y por todas mis relaciones, comencé a recordar.
Desde ese tiempo fue como si la madre tierra a través del agua, los árboles, los atardeceres, las aves y las flores, me hubiera comenzado a contar historias viejas transitadas por mi alma.
Así fue como la profundidad que ya alcanzaba en cada menstruación, llegaba aún más lejos.
Desde aquella experiencia sublime, para mí menstruar fue sinónimo de recordar. Como si la menstruación fuese inherente a una memoria antigua olvidada, y así cada sangrado llegase como una invitación que me instaba a mirar lo que en otras fases del ciclo pasa inadvertido.
» Desde que el útero vive su primer sangrado, recuerda, recuerda muchas cosas, recuerda más de lo que sus ancestras lo prepararon para recordar. Recuerda tanto que llega al fondo de dolor familiar del que es portador» Relatos del cántaro
Así es como hoy veo que el rezo menstrual conduce a una memoria y consciencia más profunda de lo que invita ya el sangrado en sí mismo.
Ésta se hace ver desde los sueños, los instantes de soledad, las creaciones, conversaciones, entre muchas instancias más.
Recuerda que todo lo que toca la tierra, ella lo transforma, por lo tanto desde el primer contacto de ésta con la sangre menstrual comienza una sutil e importante transformación de tu ADN y desde allí toda la información respecto a programas heredados comienza a vivir una alquimia muy interesante.
Por ello es que sembrar la luna y elevar un rezo con ella, para mí ha resultado una de las medicinas más reveladoras.
Me hace sentir y comprender que tenemos un poder ilimitado como mujeres creadoras, y de esta forma, cada mujer sabe cómo utilizar este poder.
Por mi parte me inspira en cada menstruación poner la intención de sanación para mí, todos mis linajes y todas mis relaciones, y ello para poder compartir mi vida, mis relaciones y mi trabajo desde un lugar cada vez más centrado y sano.
La siembra de luna es un rezo auténtico, lo que quiere decir que podemos realizarlo como a cada una nos resuene y desde aquello que de forma particular nos haga vibrar y conecte a nuestra alma.
El rezo de luna despierta esa consciencia de que en nuestro útero lo sagrado habita, y desde esa semilla ofrendamos a la naturaleza lo más bendito que puede habitar dentro nuestro: el elixir de la vida.
Por Ximena Nohemí
6 comentarios en «Siembra de luna. Ofrendar la sangre menstrual a la tierra»
Espero con ansias mis días para entregarle mi sangre a Gaia..es una manera sublime de darle lo ínfimo que ella nos da a diario, también he comenzado a entregarle mis cabellos. Bendita Seas PachaMamita!
Un rezo de luna, es alguna oración?? Y cuando le enytegas tus cabellos? Vomp lo haces???
Gracias
Hola querida Karoll, un rezo de luna es la ofrenda de nuestra sagrada menstruaciòn a la tierra 🙂
Debo sembrar todos loa días? O cuales días de mi sangrado?
Hola querida Karoll, como a ti te resuene 🙂 yo prefiero juntarla toda y hacerlo sólo una vez!
Vale, yo la hacia todos loa días, pero quería saber.. Gracias
😉